¿Cuánto cuesta perseguir un sueño?......la verdad no lo sé, me respondí en voz baja después de preguntármelo. Y me hundí en un profundo silencio. Es difícil derrocar la duda, superar la idea del que el miedo puede devorarme, y yo sin empezar.
Ocuparme ocho horas de mi empleo me hace creer que merezco una recompensa, exacto, el principio de mi anhelada huida a un lugar que no se parezca al oscuro que tienen mis ojos. Mi equivocación es grande, y me rio de tristeza por esa ingenuidad que aún sigue acompañándome; con la que justifico tal barbarismo de progreso. Ojalá todo fuera tan simple como inquirir y encontrar, así no tendría que levantarme cada mañana, ni tendría que esperar mi día de descanso para asistir al ocio. Yo francamente no me resisto al sueño, soy su puta…me toma cuando quiere, y la verdad es delicioso. En ciertas ocasiones no logro evitar su placar, tan solo es el hecho de sentir mucha motivación lo que me hace huir de la cama.
He descubierto que mientras transcurren los días, se vienen más obligaciones frente a mí, y todo por buscar la fórmula del éxito. Mi espalda se queja, mis ojos aún más, cuanto extrañamos esos días de secundaria donde solo conocíamos la escuela y era mi madre quien solventaba los gastos de mi vida. Pero sin duda cuanto disfruto saberme útil para mí.
Si he de llegar a ese lugar que miro en mis ensoñaciones, pues que venga lo que venga, me lo digo como segunda respuesta. Ya sea cuestión de suerte o de esfuerzo, la experiencia de caminar hacia ese destino que tiene la desventaja de no ser alcanzado; me inquieta, me apasionada y pone al borde mis convicciones; exaltando mis agallas, lo que me hace pensar que quizás, quizás si las tenga.
Ocuparme ocho horas de mi empleo me hace creer que merezco una recompensa, exacto, el principio de mi anhelada huida a un lugar que no se parezca al oscuro que tienen mis ojos. Mi equivocación es grande, y me rio de tristeza por esa ingenuidad que aún sigue acompañándome; con la que justifico tal barbarismo de progreso. Ojalá todo fuera tan simple como inquirir y encontrar, así no tendría que levantarme cada mañana, ni tendría que esperar mi día de descanso para asistir al ocio. Yo francamente no me resisto al sueño, soy su puta…me toma cuando quiere, y la verdad es delicioso. En ciertas ocasiones no logro evitar su placar, tan solo es el hecho de sentir mucha motivación lo que me hace huir de la cama.
He descubierto que mientras transcurren los días, se vienen más obligaciones frente a mí, y todo por buscar la fórmula del éxito. Mi espalda se queja, mis ojos aún más, cuanto extrañamos esos días de secundaria donde solo conocíamos la escuela y era mi madre quien solventaba los gastos de mi vida. Pero sin duda cuanto disfruto saberme útil para mí.
Si he de llegar a ese lugar que miro en mis ensoñaciones, pues que venga lo que venga, me lo digo como segunda respuesta. Ya sea cuestión de suerte o de esfuerzo, la experiencia de caminar hacia ese destino que tiene la desventaja de no ser alcanzado; me inquieta, me apasionada y pone al borde mis convicciones; exaltando mis agallas, lo que me hace pensar que quizás, quizás si las tenga.
No hay comentarios:
Publicar un comentario